lunes, 20 de octubre de 2014

La Primera Guerra Mundial



Autor: Michael Howard

            Ante la avalancha de libros editados para conmemorar el centenario de la Gran Guerra, resulta inevitable escoger  solamente algunos. Este puede ser una buena elección para conseguir una visión de conjunto en un número de páginas asumible.

Escrita por un historiador militar, describe muy bien las batallas y movimientos de tropas. Pero también nos aporta reflexiones certeras sobre los motivos y consecuencias de tan desmesurado y sangriento conflicto. La guerra que, según los coetáneos iba a acabar con todas las guerras. ¡Grandes adivinos, sin duda!

Como ya he reflejado en otras reseñas, tengo para mí que esta guerra influyó más que la segunda en la historia del mundo. Con la desaparición de cinco imperios (ruso, alemán, austrohúngaro y otomano) y el debilitamiento del británico, mientras que Estados Unidos toma el relevo de la hegemonía mundial. La irrupción de la mujer en el trabajo, por la enorme cantidad de hombres en el frente y el ingente número de viudas o solteras que deberán ganarse el pan en lo sucesivo, lo que se facilita con el acortamiento de sus faldas. Hecho revolucionario y que se instaura por primera vez en la historia sin mayores dramas. El enorme sufrimiento de la población civil y los destrozos en las ciudades. Y el cambio de estructura social por el que los años veinte y treinta se parecen  más a los cincuenta y siguientes, que los años anteriores al 14 a los posteriores al 18.

En lo militar, la guerra extiende el campo de batalla a las urbes, aparecen las trincheras, los gases, la ametralladora, la artillería, los submarinos, la aviación, sucumbe la caballería y los uniformes se mimetizan con el terreno porque ya no es necesario identificar a los combatientes en los enfrentamientos cuerpo a cuerpo, siendo más importante el camuflaje.

             En todo caso, es muy conveniente saber bastante antes de leer el libro, porque dado lo sucinto del texto, muchas cuestiones se dan por conocidas.

miércoles, 15 de octubre de 2014

Las hermanas Bunner


Autora: Edith Wharton

 

Nos topamos con un pequeño relato de los comienzos literarios de la autora de “La edad de la inocencia”; pero si bien en aquella la acción se sitúa en la alta sociedad  de Nueva York, en este libro, transcurre en sus suburbios.

 
Dos hermanas sobreviven al frente de una modesta mercería a finales del siglo XIX. La protectora hermana mayor, Ann Eliza, regala un reloj a la pequeña, Evelina, por su cumpleaños. La irrupción del relojero en la vida de ambas las trastoca para siempre. Las dos, solteras, aspiran a casarse con él. Pero el amor desinteresado de Ann Eliza por su hermana, aparentemente más frágil, consigue que la historia tome otro rumbo. Es Evelina quien se desposa con él, pero, como muchas veces en la vida, las cañas se tornan lanzas.
          
            El relato nos habla del amor y soporte entre ambas mujeres y el valor del sacrificio y el esfuerzo por el bien del otro. Las dos hermanas, además, a pesar de encontrarse desvalidas por su precariedad económica, disfrutan del amparo de vecinos y amigos que desinteresadamente les proporcionan afecto y ayuda.

 
            Una breve novela extraordinariamente bien escrita.

martes, 30 de septiembre de 2014

Mi abuela rusa y su aspiradora americana


Autor:  Meir Shalev

 

            Inicié este libro ávida de las prometidas sonrisas que escondía su título y las críticas que había leído. Sin embargo, mi entusiasmo languideció con más rapidez que el pasar de sus hojas.
 

            La novela plantea un recorrido autobiográfico familiar por las vidas de unos colonos judíos de origen ruso que se establecen en Israel en los años 20. Y gira en torno a la abuela del escritor cuya fobia a la suciedad y el polvo cae de lleno en lo patológico. Nunca se la vio sin un trapo al hombro, dispuesta a combatir a su mayor enemigo. El regalo de una aspiradora americana enviada por un cuñado desde Estados Unidos conforma el título. Y con este impoluto hilo conductor, su nieto nos cuenta el modus vivendi de estas colonias, sus intereses, sus aficiones y los chascarrillos y anécdotas que se han transmitido en el seno de su familia.

Quizá no estoy versada en las culturas semíticas y no soy capaz de compartir su humor autóctono. Pero no he conseguido encontrarle la gracia a una abuela tan absurda y omnipresente.

viernes, 26 de septiembre de 2014

La luz entre los océanos


Autora: M.L. Stedman


            Un veterano de la Primera Guerra Mundial encuentra trabajo en Australia como farero en la imaginaria isla de Janus. El lugar donde se unen el Océano Indico y el Antártico. Allí encuentra sosiego tras la dureza de las batallas y los horrores padecidos. Y el amor con la dulce Isabel. Sin embargo no consiguen que ningún embarazo llegue a término, lo que les llena de pesadumbre. Milagrosamente aparece, cual Moisés, una bebé en una barca junto a un hombre muerto. El matrimonio, después de sopesar qué es lo correcto, decide ocultarlo y hacer creer a todos que es hija natural suya.  Después de unos años felices en su aislamiento, descubren la historia de la niña y que la verdadera madre es una vecina del pueblo próximo. ¿Qué hacer entonces? ¿Para quién es mejor continuar con la farsa? ¿Cómo administrar el dolor que se producirá con cualquiera de las decisiones que tomen? Mientras Isabel decide continuar a toda costa, Tom es presa de atormentados remordimientos. Sin duda la petición de un consejo les habría ayudado. Pero por la soledad en la que vivían o por el miedo a escuchar lo que no querían oír, no lo hacen. Y así, actúan buscando el bien, pero condicionados por sus emociones.

           

            Caemos en la cuenta de la trascendencia de nuestras elecciones. Lo importante que es  escoger la correcta conforme a la conciencia porque después es difícil o incluso imposible volver atrás. Pero también nos ofrece la posibilidad de suavizar las consecuencias con la generosidad y el perdón.

            La autora consigue que empaticemos intensamente con los protagonistas, y hace difícil que los juzguemos culpables de un daño enorme como es el privar a una madre de su hijo a sabiendas. Y que, sin embargo, apenas reparemos en el sufrimiento inocente de esta mujer. Lo cual revela una notabilísima capacidad como escritora

jueves, 25 de septiembre de 2014

El jardín


Autora: Constance Woolson

 

A finales del XIX, una inglesa con ciertos posibles económicos, de viaje por Italia, cae rendida ante los encantos de un italiano aparentemente desvalido y solo en la vida. Sin embargo, después de casarse, descubre que era viudo con ocho hijos y una abuela enferma y malencarada. A los dos meses de la boda, el tramposo marido muere. Y ella se encuentra al frente de una familia ajena y áspera a la que no comprende. Ni su modo de vida, ni sus caracteres. Ni siquiera el paisaje le gusta.

 

A pesar de todo, estima que su deber es seguir adelante con ellos y cuidarles. A menudo recibe malos tratos por parte de los hijos y sobre todo de la abuela. Y su pequeña fortuna se escapa entre tantas necesidades. Su afán más escondido es conseguir el dinero suficiente para derribar un cobertizo y construir un jardín en su lugar. Pero las penurias económicas y el egoísmo de quienes la rodean no se lo facilitan. El lector asiste furioso a las injusticias gratuitas que se cometen con ella.

 

Sin embargo, la mirada inocente y abnegada de la protagonista no percibe así la realidad. Y finalmente podemos comprobar que de algún modo, distinto a nuestros proyectos, la vida puede encargarse de que nuestros sueños lleguen a cumplirse.

 

            Las escasas 90 fantásticas páginas nos regalan infinidad de comportamientos donde  conviven la bondad con la mezquindad, el egoísmo, la compasión y, en definitiva, la naturaleza humana.

viernes, 11 de julio de 2014

El velo pintado

Autor: William Somerset Maugham

           
            En la colonia británica en China, una bellísima joven comienza su tiempo de búsqueda de marido con grandes expectativas. Para ella y, sobre todo, para su madre. Sin embargo, no consigue encontrar lo que quiere. Y como su hermana, más fea y joven, se propone casarse muy bien, ella se apresura a hacerlo con el primero que se cruza. Un bacteriólogo aburrido y gris del que no está enamorada y que no colma sus aspiraciones sociales. Un matrimonio tan decepcionante que es una invitación a la infidelidad. Que cristaliza en la persona de un apuesto y divertido hombre casado. Al ser descubierta, confía en que su amante dejará a su mujer para casarse con ella. Por supuesto, él no desea perder su posición y la desprecia. En este punto, la protagonista no tiene más opción que acompañar a su marido al interior del país para atender una epidemia de cólera feroz.

No podía imaginar peor escenario vital para ella misma. Perdido el amor del marido, abandonada por el amante y con la amenaza cierta de la muerte. Todas sus ilusiones cercenadas. ¡Este era finalmente su dorado futuro!. En situación tan adversa, encuentra asideros: la amistad de un pintoresco funcionario de aduanas y la colaboración con las monjas francesas que asisten a los enfermos. Pero su vida sigue su curso, y no siempre favorable….


Leemos, por tanto, un magnífico relato de Somerset Maugham, el gran novelista americano del siglo XX. Con su azarosa vida y sus obras llevadas al cine de Hollywood. La agudeza de sus diálogos y  las certeras frases que retratan el ser humano: “Cumplir el deber no tiene más mérito que lavarse la cara: no basta cumplirlo, pues el deber se impone. La única cosa que vale es amarlo” O esta otra: “Sólo una persona mediocre está siempre en su mejor momento”. Naturalmente, este pensamiento no es de aplicación para ninguno de nosotros. 

miércoles, 25 de junio de 2014

El libro de la señorita Buncle

Autora: D.E. Stevenson

           
            La señorita Buncle, gris solterona en la cuarentena, vive en un pueblo inglés pequeño. Y al ver que sus rentas ya no le alcanzan, duda entre criar gallinas o escribir. Dado que estima que carece de imaginación, opta por escribir un libro sobre la vida y los personajes de la villa. Pero, para evitarse disgustos, utiliza el pseudónimo John Smith, quien narra los sucedidos con nombres falsos para los lugareños y para el mismo pueblo. La llegada de un chaval que toca un caramillo, despierta mágicamente las vidas adormecidas y consigue cambiarlas drásticamente.

            Cuando los personajes reales leen la novela, se produce un terremoto. Todos desean ávidamente saber quién de entre ellos lo ha escrito. Porque es claro que ha de ser alguien del lugar, que conoce bien a los retratados. Tanto como para revelar sus secretos, sobre todo los pequeños, tales como el uso de pectina en las mermeladas de la Sra Carter. Pero lo anodino de Bárbara Buncle, la protege de las sospechas.

            Curiosamente, en el pueblo real comienzan a producirse los mismos cambios que en el libro. Hasta el punto que hay quien se apresura a poner una gruesa lápida en la tumba de su esposa, no fuera ésta a presentarse en el comedor como sucede en la ficción.
           
Todas las transformaciones y revuelos que se producen consiguen que triunfen los personajes bienintencionados y los ruines caigan derrotados, por lo que puede calificarse como un cuento. En realidad, la bondad de la mirada de Bárbara Buncle elimina el mal en el pueblo. Y nos hace desear que si alguien ha de mostrarnos nuestros puntos débiles, que sea quien nos quiera.

La novela es exquisitamente inglesa, amable, irónica y entretenida; y desde el comienzo hasta el brillantísimo final, siempre nos acompaña la sonrisa.